jueves, 23 de abril de 2015

La gravedad de las palabras

       

   Las palabras tienen gravedad. Fuerza de la gravedad. Hay que tener cuidado con ellas porque nos rondan por dentro sin permiso,a sus anchas por la cabeza y allí también pueden hacernos daño.

  Son como asteroides que se escapan de sus cinturones espaciales y una vez puestas en camino rompen el equilibrio de las órbitas de los planetas y de los satélites.

   Hacen y deshacen el equilibrio de todas las relaciones  y sobre todo, una vez pensadas y dichas, o no dichas, cambian nuestro mundo interior y nuestro pasado para siempre.
 

lunes, 20 de abril de 2015

Expertud



La experiencia  sigue siendo tan importante como lo ha sido siempre pero la falta de respeto hacia los mayores tiene consecuencias dramáticas que unidas al mito moderno de la juventud hace que sean los jóvenes los encargados por la sociedad de perseguir ese ridículo objetivo llamado "la excelencia".

   A mi me parece que si llegáramos todos al nivel de la mediocridad habríamos logrado un hito grandioso e inalcanzable.

  Este absurdo y equivocado concepto de la juventud está convirtiendo la madurez en vejentud y la experiencia en expertud.

     Adelante valientes e inconscientes jóvenes, a vosotros os toca como ya lo hizo Alejandro "Magno" acabar de destrozar el mundo.

     A los demás os recuerdo que por razones de salud no se debe comer la fruta cuando está verde, hay que comerla siempre, siempre, cuando está madura.

jueves, 16 de abril de 2015

A verte

                                               





Fui a verte y volví a sentir el arrullo de la carretera cuando subí solo al autobús de vuelta.
     
       En aquella mesa mientras comíamos nos dijimos muchas cosas, algunas fueron duras para mi, otras muy hermosas y fueron estas últimas las que me hicieron más daño.

      Me hubiera quedado contigo si hubieras hablado de nosotros, si me hubieras visto de verdad, si no hubieras estado jugando, sin saberlo, entre mis heridas, si no me hubieras contado un cuento, si hubieras querido venirte conmigo.

     Por eso después de verte subo al autobús y a falta del tuyo vuelvo a sentir el arrullo de la carretera y siento que no me encuentro bien en ningún lugar del mundo.

viernes, 10 de abril de 2015

Mudanza

 

     Dicen que tres mudanzas equivalen en términos de desgate emocional a un incendio. Yo he vivido con horror algún conato de incendio que por suerte no fue a más y juro que en algunos momentos de algunas de las mudanzas que me han tocado en suerte hubiera deseado que todas aquellas cajas hubieran ardido espontáneamente.

     Si estás a punto de hacer una mudanza y puedes permitírtelo haz la siguiente prueba:
 
     Coge una maleta mediana, llénala con lo imprescindible e inicia un viaje de quince días. Te puedo asegurar que cuando regreses habrá cosas dentro de la maleta de las que no te habrás ni acordado.

     Por otra parte cuando haya pasado más o menos un año después de haberte mudado y te queden cajas por abrir hazte la siguiente pregunta ¿Si estas cajas sin abrir se quemaran o se inundaran o me fueran robadas echaría algo de menos? no lo creo,  puesto que si fuera así no seguirían cerradas..

    ¡Que miedo tenemos a dejarnos algo abandonado en la casa de la que nos marchamos y perderlo para siempre! cuando la realidad es que cuando nos mudamos nos vamos porque todo aquello que nos hubiera gustado hacer o tener o vivir ya se ha quedado atrás, se ha ido quemando lentamente  por dentro poco a poco.

    Nos vamos porque ya no podemos conservar y por tanto tampoco llevarnos con nosotros lo importante.

   Por eso tres mudanzas equivalen a un incendio porque cuando nos marchamos tres veces  llevamos  aproximadamente en nuestro interior la misma cantidad de cenizas que si todo hubiera ardido por fuera.
 

miércoles, 8 de abril de 2015

La sartén. Una historia violenta.

                                                                 

   Duermo en un pueblo costero en febrero vestido en medio de la humedad y del frío.  A las 5. 30 de la madrugada un hijoputa comienza a golpear todas las persianas de los bajos del mi edificio que en estos meses están deshabitados.

   Pienso en que ya que estoy vestido podría ir a la cocina , coger una sartén, meterla en una bolsa de plástico, bajar a la calle y haciéndome el borracho acercarme al imbécil ese para golpearle en ambas rodillas con la sartén utilizando la técnica que en tenis se conoce como "revés a dos manos" pero como esto sería ilegal y después tendría que matarlo para no salir trasquilado decido ponerme los tapones de los oídos que siempre tengo en la mesilla . 

   El hijoputa vuelve a despertarme un par de veces más pero se jode porque ya no me molesta tanto y cuando lo hace lo hace desde una ahogada y profética lejanía.

    Al final caigo rendido de frío y de sueño preguntándome porqué soy tan prudente y tan respetuoso con las leyes que nadie  parece  preocuparse  en   hacer cumplir. Pienso, en ese duerme vela previo al profundo sueño, que lo mismo es que no tengo huevos para tanta sartén , lo que también podría ser cierto

   Al día siguiente pasa lo mismo pero en esta ocasión decido que el hijoputa no me va a joder las pocas noches de descanso que he tenido esta temporada y bajo con la sartén camuflada en la bolsa, le rompo de un solo golpe ambas rodillas y el mastuerzo cae al suelo a peso mierda como un pelele . Le sacudo otro sartenazo en el cráneo para dejarlo todavía más inconsciente de lo que ya es y le arrastro hasta la playa dejándolo dentro del agua para que la poética marea haga el resto del trabajo.

    A partir de esa misma noche duermo como un bendito y ni siquiera miro los periódicos locales para ver si "ha sido hallado un hijoputa ya cadaver en extrañas ( aunque para mi familiares) circunstancias"

   Tomo un café en una terraza mirando el mar de invierno y pienso para mis adentros :

   Al fin y al cabo ¿Quién iba a sospechar del Sr. Artiach en los jardines con una sartén de cocina? 

   Sonrío y respiro satisfecho el aire frío y salado del Mediterraneo en invierno.


   

   

martes, 7 de abril de 2015

Frío

   

   Hay momentos que se vuelven tristes con el tiempo, pasados muchos años, cuando uno comprende mejor la importancia de algunos detalles que en principio parecían insignificantes, cuando uno llega por ejemplo y por casualidad, a una casa sin calefacción y al sentir de nuevo un frío antiguo este le transporta a momentos de su vida en los que de niño pasó tanto frío en su cuerpo pequeño de forma natural, sin importarle.

       En ese instante uno se pregunta:

 Así que ¿este es el frío que conocí de niño sin que a nadie le importase, sin que nadie lo evitara, porque alguien me envió a aquellas casas, hacia aquél frío a sabiendas?

   Entonces aquel frío y aquellos momentos se vuelven tristes, implacables, desesperanzados.

miércoles, 1 de abril de 2015

Comida de trabajo

 

 Como en el trabajo  en la esquina de una  estrecha encimera  en cinco minutos de pie. No quiero sentarme  aunque tampoco tendría donde,  y amodorrarme. Todavía quedan muchas horas de trabajo.

     Mientras se calientan las judías blancas que he traído de mi casa me como un plátano.

     Dicen que es bueno comerse la fruta antes del primer plato pero yo lo hago por ganar tiempo, claro.

     La encimera está en una cocina pequeña. En realidad esta  cocina ni siquiera es una cocina ,  es un office o lo que en español debiera llamarse antecocina solo que esta antecocina no da a una cocina si no a un patio de luces al que no se puede acceder.

     Mientras como en este reducido espacio de unos dos o tres metros cuadrados, a menudo coincido con los dos cocineros que allí trabajan y aunque una va de mañanas y el otro de tardes, a veces cocinan juntos a la hora de comer .

     Entonces comienza todo. Las puertas de las cámaras frigoríficas, de la nevera, de los hornos y del microondas comienzan a abrirse y cerrarse tras los pasos de mis compañeros y yo, plato de judías en mano, engullo y comienzo a moverme con todos ellos en un baile que ni el mismo Nureyev sería capaz de coreografiar.

    Por fin el yogur, con cuchara grande, de nuevo la rapidez. Acabo y vuelvo de nuevo a la barra. Tomo mi café mientras les sirvo a los clientes los suyos  atado de nuevo a esta  surrealista noria de producir.

    Mientras escribo estas lineas pienso  que así es la vida de todos nosotros o al menos la de de la mayoría de la gente y me felicito de tener fuerzas todavía para  llegar a casa  y poder contarlo.

lunes, 30 de marzo de 2015

Arrullo

     

Nada ni nadie puede suplir el arrullo de una madre, ro, ro ,ro.. ta,ta,ta,ta,. La vibración de su pecho al respirar y al cantar mientras nos sostiene muy pegados a su cuerpo. Su calor, el olor a café de su aliento que nos llega de tan cerca.
            
Creo que nunca nadie tuvo suficiente dosis de esto

Esta es la búsqueda, la única búsqueda. Nunca se encuentra  porque nadie quiere ni puede volver al pasado y mucho menos si tiene que llevarse consigo a su propia madre.

 He buscado ese arrullo en los libros, en las farmacias, en las canciones, en los gatos, en los cafés y en el sexo.

Dicen que el momento de intimidad más cercano a ese arrullo en la vida adulta es el sexo pero el sexo es algo que sin duda se nos escapa mientras nos ocurre y sin embargo el arrullo en el joven cerebro del bebé dura un instante mágico que es eterno

 Pensé también que me encontraría con este arrullo al otro lado de la vida, cuando fuera mayor, cuando fuera padre pero en esto tampoco hubo suerte.

 Por eso a veces voy a la orilla del río, donde supongo que Anabel se despidió de aquellos niños que llegaron  antes de tiempo pero allí entre los árboles junto al agua que se desliza tampoco encuentro el arrullo, tan solo encuentro de nuevo el recuerdo de mi propio sollozo.

jueves, 26 de marzo de 2015

Una de perros



   Unos días de baja por una "enfermedad común" o eso es lo que pone en el papel del médico.

   Salgo a dar un pequeño paseo, necesito que me de el sol y me siento en el banco de un parque.

  Lo veo desde lejos olisqueándolo todo y cuando gira veo que no tiene rabo, vaya , ya no encaja en la silueta que todos tenemos en la mente asociada  a la palabra "perro".

   Mientras se acerca dando unos cuantos rodeos pienso que a todos nos pasa un poco lo mismo. A todos nos falta al menos una parte por dentro.

    Por fin llega hasta mi, me mira diréctamente a los ojos, a bocajarro, como si supiera todo lo que me pasa y yo le devuelvo la mirada con su misma inocencia, nos vemos y ya me tiene en el bote. Le acaricio la cabeza, él disfruta de la caricia, se frota las orejas contra mi mano y yo la disfruto todavía más que él.

     Después se separa da una vuelta alrrededor de mi banco y se marcha habiendo hecho en la mañana todas las cosas sencillas que quería y necesitaba hacer.

    Justo igual que los humanos, pienso, cuanto tenemos que aprender.

martes, 24 de marzo de 2015

Truco para caminar por la calle cargada

                                                                                   

 Si vas cargada por la calle,notarás sin duda alguna, que cuando te cruzas con alguien. este alguien, en vez de apartarse para dejarte paso, pues vas cargada, en vez de apartarse, como digo, espera a que seas tu la que se quite de en medio .

  Existe un truco infalible para evitar esta falta de educación y de paso intentar que el modorro de turno se de cuenta de que no está solo en el mundo.

  Consiste en parar de andar unos metros antes de que se produzca el encuentro, e incluso dejar las bolsas medio apoyadas en el suelo, para que al baboso no le quede más remedio que ser él el que te rodee a ti.

       Esto es más didáctico si cuando el mochuelo pasa, se le mira a los ojos y sonriéndole, se le dan las gracias, aunque tampoco conviene esperar ninguna respuesta consciente de semejante besugo.

   Otro truco consiste en hacer todo lo contrario, no solo no parar, sino acelerar el paso para golpear duramente las espinillas del bodoque con las bolsas. No hay que evitar sacudir lo más contundéntemente posible porque,como dijo Maquiavelo. si vas a golpear a alguien hazlo en serio, de tal forma que le sea imposible devolverte el golpe.
 
    Tengo que desaconsejar este segundo truco porque no se debe golpear a nadie intencionadamente, ni hacerle sangre, ni hacer que aúlle de dolor bajo ningún concepto, ni siquiera aunque lo merezca por carecer de empatía y de respeto por los demás, o de inteligencia emocional o de cualquier otro tipo de inteligencia, ni aunque parezca un pedrusco u otro objeto como una silla , una mesa o un mojón de carretera.

  Pd: Tampoco se deben golpear otros objetos o piedras. Ni siquiera con otras piedras.

     

lunes, 23 de marzo de 2015

Piedra

                                                 


  Soy una piedra redonda con la base plana y caigo en medio de un océano calmo y claro.

  El día es soleado y la temperatura del agua óptima

  Mientras me hundo más lentamente de lo que mi peso recomienda, plácidamente, veo el sol caer a través del agua rompiéndose en fabulosos rayos de intensas irisaciones.
         
   Diversos animales acuáticos se interponen ahora en mi visión y veo sus panzas como antes en la tierra veía las de las nubes. Bandadas de peces, ballenas con sus crías, larguísimas  serpientes marinas, elegantes pulpos y  algún caballito de mar.

  Continúo cayendo,  la temperatura baja un poco, siento una sacudida en la base, parece que he llegado al fondo. Noto como la gravedad del planeta me fija a él como un potente imán y así es como al fin me quedo descansando, sin pensar más en nada, disfrutando por fin de la paz y del espectáculo para siempre.

sábado, 21 de marzo de 2015

Ten en cuenta



   Ten en cuenta que te puede tocar cantar una canción pero también un bingo, una comanda o un café

  Que a veces pueden pagar justos por pecadores, inocentes por culpables y sobre todo listos por tontos.

   Que su estupidez puede acabar contigo aunque seas joven y fuerte, de un solo plumazo

   Que Dios, si es que existe, puede dar pan al que no tiene dientes y dinero a quien no tiene corazón

   Que no se puede confiar demasiado en que el tiempo te de la razón, porque también la realidad  puede perder el tren y llegar a veces con retraso.

   Por eso ten siempre algo que esconder, algo escondido, algo que sea solo tuyo, que no le cuentes a nadie y construye alrededor de este intimo secreto, un fuerte refugio sólo y únicamente para ti.

jueves, 19 de marzo de 2015

Dylan

                                           


    Poco a poco nos vamos haciendo mayores y nos vamos dando cuenta de que las estrellas que vemos en el cielo no son estrellas, son galaxias.

   De que según el propio Dios, si es que existe, solo somos un simulacro o lo que es lo mismo una" Copia  hecha a imagen o semejanza de alguien o algo especialmente sagrado".

    De que nunca se sabe que es lo que es  hasta que es lo que era.

    De que nunca cogimos el tren bueno o el tren malo, simplemente viajamos en el que nos tocó en suerte.

    De que en muchas ocasiones lo que nos salvo de todo esto fue otro ser humano a través del arte.

     Cuando esto me ocurre pienso en Dylan sentado en el suelo con la espalda apoyada en la pared de una habitación vacía tirando cartas a su sombrero. Entonces me siento acompañado, me dirijo a él y le digo:

    Muchas gracias por tu consuelo, por acompañarme y por todo el sufrimiento que me has entregado transformado en tus canciones compañero.

miércoles, 18 de marzo de 2015

La ducha

         

La ducha de después, de después del trabajo.  Limpio el cuerpo y la mente. No oler a comida, a sudor a trabajo. Notar como los problemas se van diluyendo en agua caliente y son arrastrados por el desagüe.
           Fijo mi atención en la respiración. Medito en la ducha como sin duda se medita en el seno materno donde todo es atención plena. Allí no hay memoria que forme el pasado y por tanto el joven cerebro no puede todavía planificar el futuro ni proyectarse en él. Ni siquiera tiene ego.

           Así únicamente  antes de nacer existe el presente y esa etapa dura solo nueve meses.

        En la ducha, ese estado dura  unos pocos minutos y allí me conecto con mi ser primero y renazco a diario para poder reencontrarme libre  de nuevo con el mundo.

lunes, 16 de marzo de 2015

Cajas

               

  Estoy rodeado de cajas que contienen partes del pasado. Me empeño en conservarlas como si algún día fuéramos a abrirlas como si no hubiera pasado nada, y si,  ha pasado.
   
            Todos esos libros, discos, papeles y recuerdos, deberían estar en las estanterías de nuestra casa que con tanta ilusión preparamos para ellos. Hoy que vivimos en una habitación prestada ocupan, amontonados  por los rincones, un espacio que pertenece a las personas y que en este caso ni siquiera nos pertenece a nosotros mismos.
     

          Las cosas   sufren mucho encajadas puesto que se las somete a una incertidumbre y a una angustia para las que no fueron creadas y en sus contenedores inevitablemente envejecen al padecer las emociones humanas que allí las llevaron .
    Cuando un día salen de allí  aunque haya pasado poco tiempo ya son viejas porque durante su cautiverio presienten en la oscuridad un futuro incierto y demoledor, de hecho las que ya entraron siendo mayores comienzan a pensar enseguida en su propia la muerte.

        No es fácil darse cuenta de que las cosas que hay dentro de las cajas en realidad ya acabaron su existencia:
     Tuvieron una vida corta, una muerte prematura.

    Las cajas que ya están llenas contienen algo ya determinado, finito y por tanto son emocionalmente más manejables.
    Sin embargo las vacías, las que todavía esperan a ser llenadas, son las que  más peso tienen y más espacio ocupan en mi interior  porque contienen todo el peso de la pre-ocupación y de todo lo que todavía no existe: del futuro

   

     


sábado, 14 de marzo de 2015

Evasión

             


               Vuelvo a evadirme dentro de mi propia mente. Hace mucho que no lo hacía, algo viejo me debe estar pasando de nuevo.

              Recuerdo muy bien a aquél chico que se pasaba las clases persiguiendo sueños y pájaros con la mirada perdida entre las ramas de los árboles al otro lado de la ventana.
           
              Las evasiones mentales van cambiando con la edad. Ser niño fue duro pero mientras lo fui conservé intactos todos mis sueños. De adolescente mi  paraíso artificial era imaginarme estando con alguna chica. En realidad con cualquiera que me prestara un poco de atención.

              Hoy ya no puedo soñar con ellas. Ya no se soñar con cosas imposibles .

              Hoy ya de mayor no podría decir cuales son  mis sueños. Seguramente es porque como decía un viejo amigo mío "  lo que yo quiero  no es de este mundo".

martes, 10 de marzo de 2015

La superficie

                     

            Existen multitud de superficies, tantas que apenas se ve otra cosa. No te quedes nunca en la superficie.

            En la superficie están el polvo y el humo, la mayoría de las frases y  las borracheras (la resaca va por dentro).

            Sin embargo bajo la superficie están las canciones  y por debajo  las cuerdas vocales, el aire, el sonido, la voz, el cráneo vibrando.

          Por debajo de la ropa están los cuerpos, la piel, el orgasmo, los nervios la emoción, la vida y la muerte.

          Por debajo del amor el deseo de ser querido siempre y de no ser abandonado nunca de nuevo

          Bajo el café está la taza,la mesa, la tierra, bajo el dolor la pierna... el esfuerzo, bajo la noche está el día si le das la vuelta al planeta.

          Bajo la superficie está en definitiva todo lo que me importa  por eso nunca, nunca te quedes sin mi allí arriba en la superficie.

domingo, 8 de marzo de 2015

Las palabras que se dicen en sueños (o como los gatos dominan el mundo)

           

            Las palabras que se dicen en sueños si uno duerme solo es como si nunca se hubieran dicho, pero si a vuestro lado hay un ser durmiente, aunque sea un gato, esas palabras se cuelan entre sus sueños y cambian para siempre su inconsciente y por tanto su mundo entero.

            Esto nos lleva a pensar que si es el gato el que sueña y el que ronrronea  mientras duerme a tu lado, son sus sonidos los que se cuelan en tu interior, así que, esta es la forma en que los gatos domésticos  han conseguido dominar el mundo, hablando en sueños mientras duermen con nosotros.
           

       

viernes, 6 de marzo de 2015

Tener mundo

         

           
            Todavía hay quien piensa que viajar atolondrado por el mundo exterior viendo los mismos bares, los mismos hoteles, los mismos edificios de otros lugares es " tener mundo" pero por muy deslumbrante  que  sea todo esto  el viajar  es  solo haber ido por encima del mundo, quedarse en la superficie,  pero no es "tener mundo".

              Tener mundo es ser capaz de conocer a las personas  pues no hay nada que sea más complejo que otro ser humano y para poder hacer esto no hay trucos ni atajos, solo hay una condición que desbarata  todas las trampas y que muy pocas personas están dispuestas a aceptar:

              Hay  que estar dispuesto a sufrir con los demás

             El mundo ya lo tenemos dentro pero para poder verlo es necesario que alguien nos haga de espejo.
         

     

viernes, 27 de febrero de 2015

Mar

          Se camina siempre en paralelo al mar pero nunca hacia él. Esto solo lo hacen  los suicidas como Alfonsina Storni.
          Es la manera mas dramática de morir y hay que tener mucho empeño y mucha fuerza de voluntad para conseguirlo. Por eso el mar en cada ola te invita, te invita, te invita.

martes, 24 de febrero de 2015

Una de Gatos

Los gatos no tienen el don de la palabra pero tienen a  cambio su propio  mundo interior perfecto hecho de sueños .

Es allí donde en realidad habitan y de donde solo salen para llevar a cabo lo soñado.

Cuando por ejemplo uno de ellos mira de noche la carretera con las pupilas brillando y la cruza velozmente para acabar encaramado en lo alto de una cerca, eso el gato lo hace como todo lo demás ,porque antes ya lo ha soñado.

A mí  me gustaría ser soñado por un gato y que se despertara para verme y así noche tras noche habitar un poco en su mundo mágico y perfecto.

                               



domingo, 22 de febrero de 2015

Volver a ti


   Volver a ti es amargo como una infantil tarde de domingo. Mientras apuro los últimos momentos de libertad en un bar cercano  sueño que huyo a lomos de una jirafa a todo galope por la nacional dos.
   Acabo el café cierro mi pluma, mi cuaderno, cargo el pastillero de emergencia de mi bolsillo y  voy hacia a ti como si fuera un valiente al que no le importara volver a tu maldición bíblica, a tu hiriente realidad.



martes, 17 de febrero de 2015

El hurón de Sid Vicious



Hay imágenes que se  quedan grabadas en la mente a fuego, aunque solo las hayas sacado de la lectura de un libro. Últimamente me acuerdo mucho de Sid Vicious de niño, dejando a su madre con la jeringuilla colgando del brazo en el sofá para ir al colegio caminando solo, y es que hubo una época en la que madre e hijo todavía no se metían juntos.

 A veces cuando Sid salía de casa ponía su hurón en la bolsa de los libros y se lo llevaba a clase.

Imagino lo solo y desamparado que se sintió ese niño  y lo mucho que tuvo que aliviarle aquel  animal, absorbiendo en su interior parte de la angustia, de la soledad, de la tristeza y de toda la necesidad de afecto que le causaba la vida que tenía.

 Por supuesto no puedo sentir lo que sintió Sid, pero me alegro de ser capaz de ponerme en su lugar por unos momentos.

Yo siempre  he querido saber el nombre de ese hurón y que fue al final de él, porque de Sid ya sabemos muchas cosas, quizás sepamos demasiadas.
Como con el Unicornio de Silvio se agradecerá cualquier información.
                         








domingo, 15 de febrero de 2015

Tostadora

        

              El tostador me mira mal, como solo él sabe hacerlo, mientras le incrusto, como hago día tras día, una rebanada de pan en lo más profundo e íntimo de su ser.
No puede evitarlo, y tal es su ira, que su ritmo cardiaco se acelera, su temperatura aumenta y sus resistencias, ya incandescentes, se desperezan del frío de la noche con sus típicos quejidos tac, clanc, tlanc, tac, tac, tac, tac...
Al fin mi inhumano truco vuelve a funcionar, y por su boca, a modo de grito de impotencia y de rabia, expulsa la tostada crujiente, perfecta y entonces pienso :
Así es como la ira calienta la sangre del mundo para que se mueva de esta forma tan violenta.
La ira lo calienta todo y también mi tostada de desayunar. La miro y antes de morderla, sonrío.

martes, 10 de febrero de 2015

El dentista


                       De pequeño iba solo al dentista, a uno  que se llamaba “Sanguino Paz”. Cuando subía por las escaleras de su edificio pensaba que al menos de segundo apellido se llamaba “Paz”

                      De pequeño iba solo a muchos sitios reales o imaginarios pero de los reales este es el más impactante

                      En la sala de espera había una tele y más niños, ellos acompañados de adultos, algunos de los cuales hacían además mientras esperaban su turno, los deberes.

                       Resulta difícil imaginar un tormento peor para un niño que estar haciendo los deberes mientras  espera turno para que le saquen una muela y además sin poder ver la tele sintonizada en el canal de la programación infantil.

                       De fondo se oía el ruido del torno arremetiendo contra los dientes, el aspirador de saliva y los gritos y los lloros de las otras criaturas.

                       Me acuerdo de todo esto porque ahora mismo estoy sentado en una de esas cafeterías con degustación que han abierto en esa misma calle y desde aquí veo el portal y viéndolo  la pregunta que me viene a la cabeza es :

  ¿Como es posible que a nadie se le ocurriera nunca, pero nunca, nunca cerrar la puerta de la sala de espera?

domingo, 8 de febrero de 2015

Mi madre decía. Mi madre dice.

       

               Cuando toda la familia estaba reunida, abuelos, tíos, hermanos, nietos  etc.. mi madre a veces nos miraba a todos y decía “Hijos míos, estamos todos en una edad muy mala” y cada cuatro o cinco años repetía la operación

             Mi madre dice muchas veces “Cuando lleguemos a ese río tenderemos ese puente” en un alarde de lo que los psicólogos han dado en llamar mindfulness.

           Un día hablando con mi padre sobre mi madre, estaba yo quejándome  de ella, como hacemos todos los hijos algunas veces, de algo sin importancia que había hecho o que había dejado de hacer, cuando mi padre me dijo:

- Quique, tu madre tiene muchas buenas cualidades.   A lo que yo respondí.
- Si, si, también las tiene. Y los dos reímos.

    Aunque nunca conviene decirlo muy alto ni muchas veces, suelo hacer caso a mi madre mucho más a menudo de lo que ella cree.

    Últimamente mi madre dice “Ahora hay que tener mucha paciencia”.

    Yo lo repito como un mantra y procuro tenerla.
   

La óptica


             Entro en una óptica casi por casualidad pensando que me van a decir que tengo la vista cansada o algo así  y salgo con 1,75 dioptrías  de lejos, con 0,75 de cerca , con una dioptría  de astigmatismo y gafas de las que hay que llevar todo el rato.

             El astigmatismo es algo que se tiene de nacimiento. El ojo no es esférico y eso deforma la visión. 

             Bastante cabreado pienso  ¿Ninguno de los oculistas a los que he ido en mi vida se han tomado la molestia de mirarme bien?

             Bueno, dejemos el tema y el enfado y veamos, por fin, el lado positivo. Me pongo las gafas y las nubes tienen volumen, no digo más.

            Y dicho esto me pregunto:

 -¿Puede mejorar esto mi capacidad intelectual? (No es cierto que todos estemos contentos con la inteligencia que tenemos).

-  ¿Puede esto incluso empeorarla? (esto si que sería preocupante).

- Tengo una amiga que cuando íbamos juntos al cine me decía “Quique me voy a poner las gafas que oiré mejor”.  Y la chica  decía que era verdad que oía mejor con gafas. ¿Me pasará lo mismo a mi? ¿Oiré mejor con gafas?

  -¿Mejorará mi caligrafía? No olvidemos que el astigmatismo deforma la visión  y por tanto también las letras. Digamos además que mi mala letra es legendaria, que mis amigos me regalan regularmente los cuadernillos Rubio y que cuando me ven escribir me dicen con sorna “¿Qué Quique, otra vez escribiendo en Inglés ? 

   De hecho una vez tuve una profesora de Inglés que tras cada examen me decía “Artiach no le puedo suspender porque no se muy bien lo que ha escrito, en el recreo vaya a la sala de profesores” 

  Una vez allí comenzaba el juego, ella me preguntaba: ¿Qué ha puesto aquí, since o for? a lo que yo respondía ¿Usted que cree?

-¿Al ver más cosas, un 20% más, escribiré más?

- ¿Seré "más bueno", más humano?


   Y por último ¿Me estaré quedando también sordo?



lunes, 2 de febrero de 2015

Poniendo cafés

                     

            En mi trabajo de camarero preparo a primera hora de la mañana dos cafés con leche para dos curas que hablan de sus asuntos. Esta vez son asuntos mundanos.

            Vierto la leche batida sobre los cafés y al final aparecen en las superficies dos dibujos en forma de espiral.

            Pienso mientras tanto en cuando de niño cogía de una estantería alta un atlas universal para ver fotografías de nebulosas espaciales. Buscaba entre ellas la más colorida, brillante y hermosa y entonces decidía por mi mismo que aquella nebulosa era Dios y me sentía  por ello reconfortado y seguro.

           Sirvo los cafés y me alejo pensando que una vez de niño estuve cerca, muy cerca de Dios