En casi todas las actividades humanas, sobre todo en las más importantes, hay un aprendizaje, donde se enseña además, que toda acción requiere una preparación, incluso unos preliminares, sin embargo a la tarea de pensar, que se supone que es la que determina todos los asuntos de nuestras vidas nos lanzamos sin adiestramiento, sin preparación , sin preliminares, porque creemos, nadie sabe por qué, que todos sabemos pensar desde nuestra más tierna infancia, sin embargo, para este acto de pensar, ni siquiera tenemos previsto un precalentamiento.