lunes, 30 de mayo de 2016
Goethe
La señora espera ansiosa su pincho de tortilla y su caña con limón y no a que le digan que le quieren o a que le pregunten "¿qué tal estás?".
¿Es esto a lo que llaman "disfrutar de las pequeñas cosas"?
Dicen que las últimas palabras de Goethe antes de morir fueron "¡Luz! ¡Más luz!" y ponen este hecho como ejemplo del gran afán de cocimiento de este gran sabio, considerado por muchos como el hombre más inteligente de la historia.
Sin embargo a mi me parece, y soy consciente de lo modesto de mi opinión, que también podría haber dicho "¡Amor, más amor!" y que así habría puesto énfasis en el verdadero conocimiento,en lo que es útil y valioso en la vida, en la sensibilidad, que es sin duda la mayor de las inteligencias.
!
domingo, 29 de mayo de 2016
La bolsa de canicas vivas.
Tengo en mi poder una bolsa de terciopelo de joyería con unas cuarenta o cincuenta canicas vivas.
Sólo las he utilizado una vez, acababa de conseguirlas gracias a mis contactos de mi antiguo oficio de juguetero.
Son maravillosas, de diferentes colores y tamaños y tienen una cualidad mágica, si las sueltas se meten en el primer organismo vivo que encuentran, les da igual el orificio, tienen esa costumbre y así se recargan de energía vital.
De vez en cuando, por eso, conviene soltarlas y yo lo hice en aquel momento siguiendo las instrucciones a rajatabla.
Buscaba una ocasión y la encontré en un bar. Era un local muy pijo y la gente muy maleducada, gritaban y se reían como hienas, a pesar de su ropa de marca y de sus complementos de lujo, o quizás a causa de ellos, se volvían gilipollas.
Así que solté mi canicas, dejé la bolsa de terciopelo en la basura del baño de caballeros como indicaban las instrucciones " Deje la bolsa en un lugar discreto donde ellas puedan volver sin dificultad y disfrute del espectáculo" y eso hice.
Poco a poco las canicas se iban distribuyendo por las perneras de los pantalones de la gente.
Se notaba en los clientes afectados, al principio un ligero cosquilleo, luego miraban por debajo de las mesas para asegurarse de que nadie les estaba metiendo mano y después comenzaban las expresiones de sorpresa y o placer dependiendo de la personalidad de cada cual.
Las canicas jugueteaban por la distintas cavidades corporales de hombres y mujeres y todos ellos recomponían sus caras, cuyas expresiones iban desde la vergüenza o la culpa, a otras más cercanas a las que se tienen en el momento del orgasmo. Esta estimulación íntima tan repentina e inesperada, en un lugar público, podía introducir al personal en una amplia gama de variados estados.
Fue un momento mágico ver todas esa caras en general agradablemente descompuestas y saber que yo era el responsable de tata agitación.
Poco a poco las canicas, ya recargadas de energía vital, salieron de los cuerpos y volvieron discretamente a la bolsa de terciopelo, previo paso por el lavabo, cuyo grifo de alguna manera ellas habían conseguido abrir para limpiarse de cualquier rastro de fluidos corporales.
Nunca he vuelto a utilizarlas. De vez en cuando, de noche se mueven haciendo un curioso ruido al rozarse entre ellas, creo que ya quieren salir, así que si me ves en un bar y notas que algo sube por tus piernas, no te preocupes, relájate y disfruta.
sábado, 28 de mayo de 2016
Ángeles durmiendo.
Esta mañana mientras paseaba como acostumbro, he visto dos ángeles dormidos en dos bancos del parque.
Dormían la mona. De vez en cuando se les ve acodados en la barra de un bar cercano, con un vaso de bourbon con hielo en las manos, unos vasos que nunca se les acaban y claro así quedan los pobres al día siguiente.
Su mirada es triste y su trabajo, como el bourbon, inacabable. Llevan así toda la eternidad, y lo que les queda de ella. Sin futuro, sin posibilidad de ascenso, sólo de descenso a los infiernos. y esto, la verdad, animar no anima.
Se parecen mucho a nosotros estos dos ángeles o por lo menos les pasan casi las mismas cosas.
Quién lo iba a decir, ellos, tan divinos, tan humanos.
jueves, 26 de mayo de 2016
Siguiendo parejas
Hace unos días en el bar vi algo monstruoso, una pareja besándose, parecían llenos de amor pero sin embargo había algo en ellos que resultaba demoniaco.
Llevado por el morbo y por la curiosidad, me levante a la vez que ellos y les seguí discretamente.
Como sospechaba se dirigían a un hotel, pero mi sorpresa fue tremenda cuando vi que en la puerta les esperaba otra pareja y allí en plena calle, cada uno de los cuatro cambió de pareja, una de ellas entró en el hotel y la otra siguió caminando con total naturalidad.
De nuevo los seguí para ver con espanto que la operación se repetía en otro hotel, y en otro y en otro, hasta el infinito.
A mi no me importaba quién se acostaba con quién pero mi curiosidad se había convertido, después de varias horas de seguimientos, en una sensación de ansiedad y angustia cercana a la obsesión, ¿En qué consistía aquello, cuando acabaría y cómo se había organizado aquel bucle eterno?
Continué toda la tarde y toda la noche tras ellos, sin apenas comer ni beber nada. hasta que comenzaron a fallarme las fuerzas. Debí desmayarme en plena calle porque desperté en una cama de hospital.
Llevo aquí varios días con la mirada extraviada y mis pensamientos perdidos en esta experiencia que no logro entender. Viene la enfermera, me trae otro sedante.
Tengo la firme intención de seguir investigando este asunto en cuanto logre salir de aquí, por mucho que mi psicóloga y mi psiquiatra quieran impedírmelo
miércoles, 25 de mayo de 2016
El Bazar Sonia
Desde el bar donde escribo se ve el cartel de "Bazar Sonia". Hoy estoy cansado y muy aburrido y no se si pedir otro cortado o pasar al bazar Sonia a comprarme unas bragas, sólo por ver la cara que pone Sonia.
Opto por lo segundo y ante mi asombro Sonia es una chica china a la que no sorprende en absoluto mi petición. Se levanta, me coge por el brazo y me lleva, casi a rastras, a la sección "blagas" donde me enseña todo tipo de ellas:
- Esta mas lefuelzo bajos, mile mile. dice casi gritando.
- Bien bien, respondo azorado.
- Esta, tanga, mile , me dice dándome un extremo y tirando del objeto en cuestión pasillo atrás hasta límites insospechados.
- Bueno, bueno, buen material, digo yo acercándome aparatosamente hacia la puerta.
Pero Sonia es una vendedora de las buenas y no quiere soltar presa, así que al final y para no alargar más el bochornoso espectáculo me voy de allí con media docena de bragas, de variados tipos y colores y encima no son de mi talla.
!Dios mío cuanto pervertido hay por el mundo!
Nota: En la imagen Sonia persiguéndome por el pasillo para evitar que escape.
Nota: En la imagen Sonia persiguéndome por el pasillo para evitar que escape.
martes, 24 de mayo de 2016
La colección Kazinski
La Kazinski es una de las colecciones de fotografías más buscadas del mundo. Realizadas con una cámara antigua, reveladas por medio de un procedimiento desconocido, en un papel absolutamente único, tienen estas imágenes tomadas por Kazinski, unas propiedades mágicas poderosas sin igual.
Unas son capaces de arrastrar la mente al pasado, donde fueron tomadas, para vivirlo de una forma tan intensa que hay quien ha muerto de inanición contemplándolas.
Por esa razón nunca hay que verlas a solas, siempre tiene que estar presente, al menos, una persona de la mayor confianza que sea capaz de arrebatarte la foto de las manos y de ponerla boca abajo sin mirarla, o en ese caso podrían ser dos personas las que fallecieran de hambre o de sed. Tal es la belleza y la intensidad de las sensaciones y emociones que generan en el cerebro de estas imágenes, muy superiores a las producidas por cualquier droga conocida y con una capacidad de adicción mayor también que cualquiera de ellas.
Especialmente peligrosas son las fotografías eróticas e incluso pornográficas que realizó el autor al final de su etapa de experimentación con sus peculiares métodos.
Dice la leyenda que una de estas fotografías fue la que le llevó a la muerte , revelando una de ellas, Kazinski, que por supuesto conocía los efectos y los había experimentado en si mismo murió de un tremendo orgasmo al contemplar dicha foto en la que una dama llegaba al éxtasis amoroso.
Tuve la oportunidad de ver una de esas fotos, su propietaria, una buena amiga mayor que yo me la quitó de las manos antes de que llegara a perturbarme y ante mis ruegos prometió dejármela en herencia si era capaz de centrarme y equilibrarme lo suficiente.
Han pasado ya muchos años de aquello y no he hecho muchos avances al respecto. No tengo la templanza suficiente para poseer una Kazinski así que es improbable que mi amiga me deje en herencia este objeto, cuando desgraciadamente fallezca, lo que espero que no suceda hasta dentro de muchos, muchos años
Unas son capaces de arrastrar la mente al pasado, donde fueron tomadas, para vivirlo de una forma tan intensa que hay quien ha muerto de inanición contemplándolas.
Por esa razón nunca hay que verlas a solas, siempre tiene que estar presente, al menos, una persona de la mayor confianza que sea capaz de arrebatarte la foto de las manos y de ponerla boca abajo sin mirarla, o en ese caso podrían ser dos personas las que fallecieran de hambre o de sed. Tal es la belleza y la intensidad de las sensaciones y emociones que generan en el cerebro de estas imágenes, muy superiores a las producidas por cualquier droga conocida y con una capacidad de adicción mayor también que cualquiera de ellas.
Especialmente peligrosas son las fotografías eróticas e incluso pornográficas que realizó el autor al final de su etapa de experimentación con sus peculiares métodos.
Dice la leyenda que una de estas fotografías fue la que le llevó a la muerte , revelando una de ellas, Kazinski, que por supuesto conocía los efectos y los había experimentado en si mismo murió de un tremendo orgasmo al contemplar dicha foto en la que una dama llegaba al éxtasis amoroso.
Tuve la oportunidad de ver una de esas fotos, su propietaria, una buena amiga mayor que yo me la quitó de las manos antes de que llegara a perturbarme y ante mis ruegos prometió dejármela en herencia si era capaz de centrarme y equilibrarme lo suficiente.
Han pasado ya muchos años de aquello y no he hecho muchos avances al respecto. No tengo la templanza suficiente para poseer una Kazinski así que es improbable que mi amiga me deje en herencia este objeto, cuando desgraciadamente fallezca, lo que espero que no suceda hasta dentro de muchos, muchos años
lunes, 23 de mayo de 2016
La broma
Unos chicos ya mayores de unos veinte o veinticinco años, que salían con las chicas que nos cuidaban, a la gran cantidad de niños que en verano nos juntabamos en aquella casa, me cogieron en plena calle uno por las piernas y otro por los pies y comenzaron a balancearme, cada vez con más fuerza, era de noche . No contentos con asustarme empezaron a contar " a la de una, a la de dos, y a la de tres" y me lanzaron contra un montón de arena de obra que había a unos metros de allí. Me soltaron como si fuera un saco, como si fuera un objeto, algo sin valor, ni animal ni humano
Me levanté del suelo como pude mientras las chicas me ayudaban a quitarme la tierra del cuerpo. Tenía sangre en la boca, tierra en los dientes y el cuerpo lleno de magulladuras provocadas por el tremendo golpe.
Una de las chicas me acompañó al baño. Mientras me lavaba yo tenía en el cuerpo el sabor amargo de la crueldad que demasiadas veces ejercen los adultos contra los niños.
Me levanté del suelo como pude mientras las chicas me ayudaban a quitarme la tierra del cuerpo. Tenía sangre en la boca, tierra en los dientes y el cuerpo lleno de magulladuras provocadas por el tremendo golpe.
Una de las chicas me acompañó al baño. Mientras me lavaba yo tenía en el cuerpo el sabor amargo de la crueldad que demasiadas veces ejercen los adultos contra los niños.
domingo, 22 de mayo de 2016
El perro que mira a los ojos y ríe.
Vaga por el mundo cierto perro inmortal, su aspecto de chucho callejero, viejo, famélico, con el pelo largo , sucio y con canas en la barbilla le hacen poco agradable como animal de compañía.
Este can es uno de los seres encargados de propagar la locura. Quien comete la imprudencia de atenderle, llevado por su humanidad, se encuentra antes o después con una mirada perruna, intensa como los rayos del mismo Sol, que atrapa la atención del infeliz .
Una vez fijadas ambas miradas, la una en la otra, el perro se ríe con la propia risa de su víctima haciendo que esta enloquezca en un solo instante.
El perro sigue su camino y jamás se logra saber la razón de la locura, por lo que el enfermo es diagnosticado como "Incurable" en todas las ocasiones.
Te cuento esto para que andes con cuidado. No siempre conviene ser humano.
Este can es uno de los seres encargados de propagar la locura. Quien comete la imprudencia de atenderle, llevado por su humanidad, se encuentra antes o después con una mirada perruna, intensa como los rayos del mismo Sol, que atrapa la atención del infeliz .
Una vez fijadas ambas miradas, la una en la otra, el perro se ríe con la propia risa de su víctima haciendo que esta enloquezca en un solo instante.
El perro sigue su camino y jamás se logra saber la razón de la locura, por lo que el enfermo es diagnosticado como "Incurable" en todas las ocasiones.
Te cuento esto para que andes con cuidado. No siempre conviene ser humano.
sábado, 21 de mayo de 2016
Las farolas
Las farola iluminan cada una su territorio y su luz no puede ir más allá.
Mucho más inmóviles que los árboles, sin sus ramas que blandir al viento.
Sólo se les hecha en falta cuando no funcionan y eso uno lo descubre en mitad de la noche.
Su color verde oscuro, que en la naturaleza pasaría desapercibido es su mejor don y hace que las veamos desde la lejanía sobre un fondo a menudo gris.
Solo son bellas observadas, junto a otro millón de puntos de luz desde el espacio pero eso no se nos concede, a menudo.
viernes, 20 de mayo de 2016
Mobiliario urbano
Corre el rumor, absolutamente cierto a mi entender, de que algunos de los elementos del mobiliario urbano de nuestra ciudad son orgásmicos, si , si, como lo lees. Por eso a veces se ven abuelitas temblorosas apoyadas en los postes de los semáforos.
Para evitar que corra la voz y que la gente se de al vicio en público, además gratis y a costa del ayuntamiento, los operarios cambian con regularidad de sitio las farolas, semáforos, bancos, papeleras y marquesinas que poseen esta cualidad.
No queda otro remedio, pues cuando se procedió en primera instancia a retirar dichos elementos, se produjeron en los almacenes municipales los más extraños sucesos imaginables, tremendos ruidos, fugas de agua de origen desconocido, cortes de luz, averías de todo tipo , incendios... que sólo cesaron cuando se volvió a colocar todo el mobiliario retirado de nuevo en la vía pública.
Puede que no me creas, pero este verano pasea por la ciudad, toca los semáforos y las farolas, las papeleras, siéntate en los bancos y si encuentras alguno de estos portentosos objetos, disfrútalo solo, en compañía, o con amigos.
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