No
sé por qué, estando con Anabel en Venecia, se me ocurrió entrar en unos grandes
almacenes tipo C&A y comprarme unas zapatillas de deporte para hace un poco
de ejercicio. ¡Menuda tontada!, pensé para mí. ¡Con la de cosas que hay que
hacer y que ver aquí y a mí, que hace años que no corro, se me ocurre justo
hoy!