domingo, 4 de septiembre de 2016

Salón.

   Por unos días he dormido por razones prácticas en el salón dela casa de mis padres, en el sofá. Es una habitación sin visillos por el que las luces de las farolas y el resplandor de estas, rebotada en los techos de los coches, se cuela por las  ventanas.

   Allí, tumbado, tranquilo he  repasado con la mirada los viejos objetos de mi niñez, los libros, los cuadros, siempre iguales.

   Todas esas cosas que no cambian como lo hacemos nosotros, a lo largo de nuestras vidas.


jueves, 1 de septiembre de 2016

La herida abierta.

  La siento a veces como un picor insoportable. La costra unas veces seca, otras blanda y tumefacta por la acción de los un ungüentos y las vendas.

  La herida abierta en la pierna derecha a la derecha de mi espinilla donde recibí el golpe ya hará  un año.

  La maldita herida no se cura, no cierra. Mierda de golpe, mierda de médicos que no la curan "Hay que tener paciencia" dicen, con la puta herida abierta.

  Es fácil decirlo cuando puedes apoyar la pierna. Cuando duele llega desde el pulgar hasta la cadera el dolor rabioso de la herida abierta.

  A veces sueño aliviado que me cortan  la pierna. Un poco de paz , hasta que me despierta, con su dolor sordo y tenso la herida abierta.

la cocina existe.



     Todavía hay quien dice que la cocina sólo existe dentro de tu cerebro y que sólo cuando entras en ella existe. Dicen que  cuando te vas deja de existir. Quizás desaparece de tu mente o de tu imaginación pero ¿Existiría entonces si la recrearas en un recuerdo que fuera pensado en otra habitación? Por supuesto pero, además la cocina existe aunque tú no estés, aunque te metieran en un saco con los ojos vendados en la cocina esta seguiría existiendo allí fuera, en la realidad.

    Tiene que existir por fuerza, es necesario, para que puedas ir, para que puedas volver a entrar en ella. 

miércoles, 31 de agosto de 2016

Historia de la cerveza (Con dos dedos de espuma y un poco de humor).




  Nunca me ha gustado la cerveza y vive Dios que la he probado y reprobado. De hecho la cerveza nació en Mesopotamia, como casi todo y para elaborarla se mascaba el grano y después se hervía la maseta resultante  durante horas. A esta tarea se dedicaban y se siguen dedicando en algunas partes del mundo las mujeres, las mejores mascadoras por lo visto son las ancianas, a menos dientes mejor cerveza.

   Reconozco que desde entonces el proceso de elaboración ha cambiado bastante, pero tiene ese sabor amargo que no me acaba de entrar y me da mucha envidia porque veo que es algo bueno de lo que la gente disfruta, mucho.




  Los Sumerios ya tenían ocho tipos de cerveza de trigo, ocho de cebada y tres de mezcla de varios cereales.

lunes, 29 de agosto de 2016

Polos magnéticos.

 

   En mis sueños leo en un libro que los polos magnéticos de la Tierra han intercambiado su posición.

   Me pregunto cómo puede ser esto posible y el libro me responde que no se sabe pero que ya ha ocurrido unas ciento setenta veces.


   Imagino, todavía dormido, que la Vía Láctea es una tortilla de patata con cebolla en la sartén de un Dios que le da la vuelta con elegancia, gracia divina y delicadeza, mientras hambriento piensa de dónde va a sacar el pan para semejante bocadillo.

sábado, 27 de agosto de 2016

Ciudadanos "De a pie " pero sólo "de a pie".



    Ni siquiera los parques se libran de los vehículos, aunque sean de mantenimiento.

  Nos vamos acostumbrando a que la calle sea cada vez más incómoda para el ciudadano, pero nos damos cuenta de que con cada reforma de cada calle se van eliminando bancos. Sobre todo nos damos cuenta cuando tenemos a nuestro lado a  personas mayores que tienen que ir descansando en los "poyetes" de las tiendas, de las farolas  o en los bancos de las marquesinas de los autobuses, comprados como todo el mobiliario urbano, a una empresa extranjera, cuando todavía la zaragozana  Averly estaba en pie y funcionando. (Creo recordar que la cosa no fue barata)

  Sólo en los parques hay bancos para sentarse, pero este no es el problema, el problema es que además en ningún sitio de la calle haya ni una jodida mesa para comer, escribir o apoyarse. 

  Se me dirá que en la calle nunca ha habido mesas, razón de más para darnos cuenta de que el problema ya viene de lejos y que al fin y al cabo y curiosamente, el ciudadano "de a pie" nunca ha sido tomado en cuenta cuando se han diseñado las calles por las que se ve obligado, le guste o no, a transitar.

lunes, 22 de agosto de 2016

De tanto en tanto

 El sol de las seis y veinticinco corta la plaza casi vacía en tres.

 Al fondo, en la sombra una pareja bebe cerveza caliente diréctamente de la litrona.

 Su aspecto es alegre y sobre todo relajado, él sentado en el banco, ella de pie frente a él hojea un cuaderno y le explica cosas que él, ya medio tumbado que en su mente ya no se esfuerza en comprender.

 Centra su atención en la plaza, en el viento que sopla fuerte y cálido, en su botella, en su cigarro y sobre todo en las formas del humo que exhala, en mitad del verano, de tanto en tanto.